Pues nadie debería ofenderse entonces!

Hace un par de días que algo me molesta en extremo y, como Féisbuk se ha transformado en mi lugar de catarsis donde vuelco lo que en realidad (quizás) debería volcar aquí (y volver y hacer más rico este espacio), pues entonces aprovecho y descargo aquí aquello que me viene carcomiento la paciencia.

Supongamos que un blog se llama.... "Que nadie se ofenda". Y trata (ponele) de historias creativas (ponele), inventadas (ponele) que despotrican (ponele! que nadie se ofenda por esta palabra!) sobre otras personas, sobre las clases de grupos de individuos que pululan alrededor nuestro y sus respectivas características generales. Peeerooo, claro, sin malas palabras. Solamente con "etiquetas" y "generalizaciones" (PONELE) que hacen, por ejemplo, de un individuo que pasa un fin de semana en familia sentado a un lado de la panamericana, básicamente un ordinario (ponele).
En fin, creo que me explico. Peeerooooooooooo, si una comenta, y dice que no está de acuerdo con algo, que no siempre esa persona tendrá comentarios halagando su obra, o simplemente hace una crítica que viene a cuento de la entrada y eleva el tono por encima del normal de los comentarios, que vendrían a ser todos del estilo de: "Sos grosx!!!" (ponele), "Dale para adelante que me encanta tu blog!!!!" (ponele), "Es tal cuál lo decís!!! Cómo me reí con tu descripción!!!! Qué genialll!!!" (ponele). Si una dice todo esto, UNA termina siendo la agresiva y la que está fuera de lugar (SIC). Y le dicen que no le contestarán porque su comentario no tiene nada que ver con el espíritu del blog (????).

Quizás los lectores (si quedan por aquí) de este blog sabrán (y sino, se los cuento, por si todavía anda alguien por allí o se acerca alguien nuevito por alguna de esas casualidades de la internete), que todos quienes tenemos blog, hemos tenido que lidiar con comentarios que van desde lo burdo, a los discriminatorio; desde lo agresivo (pero en serioooo), hasta lo ácido. Y, según mi opinión (que es mía propia de mi propiedad absoluta), si queremos tener un blog que esté abierto a todo el mundo en la blogósfera, este tipo de comentarios *siempre* van a existir, y la única forma de manejarlos es contestarlos con altura (o no) y enfrentarlos como más nos plazca. Pero criticar o denostar un comentario que no nos gusta (porque sí, creo que es así y punto y si no te gusta pensá como quieras) es, cuanto menos, inmaduro (ponele).

Listo. Hace días que venía con esto en mente y no tenía ganas de volver a contestar en un blog donde, además, el resto de los "comentaristas" agreden a quien supuestamente agredió (yo) y le dicen que no está bien ser agresivo (?).

Gente del mundo: si tenéis un blog, preparaos para las críticas porque las tendréis. Si tenéis un blog en el cual criticáis a sectores de la raza humana haciendo generalizaciones burdas que pretenden ironizar sobre su naturaleza, preparaos para, quizás, críticas más duras aún. Y sino.... seguid viviendo en vuestra nube de pedo vuestro mundo ideal e ignorad dichos comentarios y saltad entre arco iris de colores mientras os engañáis pensando que el mundo es de algodón.

He dicho. (y me siento genial).

Alma en su Laberinto  ··